Debido a factores como la inestabilidad de los mercados financieros internacionales, durante los últimos años los precios de metales y minerales preciosos han presentado un marcado repunte; lo anterior, aunado a la estabilidad económica y financiera del país, ha animado a inversionistas nacionales y extranjeros a poner sus ojos sobre el valor que Sinaloa esconde en sus tierras y montañas.
México y el auge minero

Actualmente México cuenta con el primer lugar en inversión en exploración minera de América Latina y es el cuarto a nivel mundial, con un 6 por ciento de participación, sólo debajo de Canadá (18 por ciento), Australia (13 por ciento) y Estados Unidos (8 por ciento).

Según cifras de la Cámara Minera de México (Camimex), la inversión minera en el país ha pasado de 250 millones de dólares en 2002, a aproximadamente 7 mil 647 millones en 2012, lo que posiciona a esta industria como la cuarta generadora de divisas netas al país, después de la industria automotriz, la petrolera y las remesas.

El sector en Sinaloa

En este panorama, Sinaloa ha sabido aprovechar las oportunidades del mercado y las políticas de atracción de inversión. En 2012 la producción acumulada de minerales metálicos fue de 2 mil 714 mdp, de manera que en los últimos cuatro años el PIB minero del estado ha crecido un 380 por ciento, pasando de mil 69 mdp en 2008 a 5 mil 163 en 2011. Asimismo, la minería se ha consolidado como la principal fuente de inversión extranjera directa (IED), por encima del turismo, las manufacturas y los bienes raíces. Al cierre de 2012, la IED alcanzó un monto de 114 mdd, de los cuales, la minería representó el 26.8 por ciento de las mismas, alcanzando los 30.8 millones.

De acuerdo a información proporcionada por la Secretaría de Desarrollo Económico, actualmente el estado cuenta con un total de 73 empresas trabajando en 108 proyectos mineros, lo cual la posiciona como la cuarta entidad por número de proyectos en la actividad minera, sólo superado por Sonora, Chihuahua y Durango. En cuanto a los municipios con mayor actividad, Cosalá ocupa la primera posición, con 17 proyectos de exploración; seguido por Choix, con 15; y Mocorito, con 12 proyectos.

Nuevos proyectos

En los últimos meses, el estado ha visto la puesta en marcha de diversos proyectos de explotación minera, los cuales, en posteriores etapas, seguirán generando valor en el estado.

A mediados del año pasado, el vicepresidente ejecutivo de operaciones de la minera canadiense Chesapeake, Gerald. L. Sneddon, anunció la inversión de 6 mdd en la construcción de infraestructura minera en Sinaloa y Santiago Papasquiaro, Durango, lugar de uno de los yacimientos de oro y plata más importantes a nivel mundial. Aunque este se encuentra en territorio duranguense, por las condiciones del terreno resulta más factible transportar el mineral hacia Sinaloa, por lo que, producto de esta inversión, se instalará una planta de beneficio en la comunidad de El Ranchito, Cosalá.

Por su parte, con una inversión de 170 millones de pesos, la planta de mineral de fierro Mina San José, en la sindicatura de Las Tapias, contará con capacidad para procesar hasta 6 mil toneladas de polvo de hierro por día, generando una producción mensual de hasta 120 mil toneladas de concentrado de hierro para exportación, situación que impulsará la diversificación de la actividad económica, impactando de manera directa la operación de los puertos de Topolobampo y Mazatlán.

El coordinador general de la mina, Marco Antonio Acosta, ha detallado que la operación de esta planta estará dividida en tres fases: la primera, ya iniciada, consta de la producción y venta de 100 mil toneladas mensuales de mineral de fierro; la segunda contará con una inversión de 6 millones de pesos en una planta de flotación; y una última con una inversión de 50 millones de pesos para producir a mayor escala. Finalmente, durante enero de este año se inauguró la primera fase de la mina El Gallo en Mocorito, con una coinversión de 28 millones de pesos entre la canadiense Mc Ewen Mining y la mexicana Pangea. El gerente general de la planta, Salomé González, ha anunciado una inversión de 200 millones de dólares en una segunda fase durante 2014, con lo cual se incorporará la extracción de plata al proceso de la misma. En su primera fase, la mina tiene prospectado producir 30 mil onzas de oro al año.

Instrumentos de transformación

Para Sergio Mario Arredondo, el auge que la industria minera ha tenido durante la última década obedece a la baja en los índices de productividad que este sector ha venido presentando en estados como Sonora y Chihuahua, por lo que, según dice, es natural que los inversionistas volteen a ver a Sinaloa; sin embargo, aunque para el economista estas inversiones sí llegan a generar cierto dinamismo en las zonas serranas, esta no deja de ser una derrama marginal.

El también catedrático de la UAS apuntó que la situación con la minería es la misma que presentan otros sectores donde existe poco o nulo valor agregado, y mencionó que para aprovechar correctamente el despunte de las inversiones, es necesario proyectar formas en que esta inversión encuentre elementos para que se transformen los minerales que se están extrayendo. Puso como ejemplo al hierro, donde el proyecto del gasoducto genera las condiciones necesarias para la instalación de fundidoras que le den un mayor valor a este mineral.


FUENTE: http://www.debate.com.mx